sábado, 23 de diciembre de 2017

Reseña de la trilogía en la página de la revista Hang Ten

  Mi más profundo agradecimiento a la página especializada en Long Board 'Hang Ten' por la mención que han hecho de la trilogía Surf or Die... Of Laughter y por sus positivas palabras.

"Personalmente estoy muy contento de haber leído estos libros, y que en la Central me los hayan recomendado. Son tres libros con los que te hartas de reír. Recorre todos los estereotipos, clichés, manías, del surfing con un toque de humor".

  
Es todo un honor compartir espacio con esas obras y autores. (Foto Hang Ten)


 También es de agradecer que espacios literarios como la Librería Central de Gijón hayan permitido poner mis tres libros al alcance de sus clientes y amigos. Es todo un honor que las historias de Jon Satrústegui compartan estantería con autores internacionales y best sellers.

http://www.revistahangten.com/blog-longboard-surf/literatura-surfera-en-la-libreria-central-de-gijon/

miércoles, 13 de diciembre de 2017

Kun_tiqi Surfboards. Una verdad incómoda

Foto cortesía Kun_tiqi.
A continuación pongo un breve extracto de la entrevista a Stefan Weckert, de Kun_tiqi Surfboards que ya está disponible en Staf Magazine. Reflexiones y vivencias a partes iguales de este shaper especializado en madera de balsa que invitan un poco a la reflexión sobre el impacto que la industria del surf tiene en el medio ambiente; porque sólo si somos plenamente conscientes de que nuestra actividad genera residuos y contamina (ya sea desde la fabricación de una tabla o en uno de nuestros numerosos viajes en coche o en avión en busca de las mejores olas), estaremos en condiciones de adoptar soluciones.


 
"Hace más de una década Clark Foam echaba el cierre y ponía al mundo del surf contra las cuerdas. El gigante americano era el que suministraba foams a la mayoría de talleres de los Estados Unidos y de gran parte del mundo y, con su inesperada decisión, dejaba momentáneamente a los shapers sin materia prima con la que fabricar las tablas que posteriormente usarían los surfistas en el agua. Este cataclismo en el panorama surfero internacional le pilló a Stefan  Weckert en Ecuador, hasta donde también llegaron las turbulencias generadas por el cierre. Stefan, que había ido al país sudamericano para realizar unas prácticas relacionadas con sus estudios de Administración de empresas, quería surfear, pero la escasez de foams habían dejado a los talleres sin una sola tabla; y el mercado de segunda mano era incapaz de abarcar toda la demanda. Cuando pensaba ya que tendría que renunciar a su deseo de probar las olas ecuatorianas, encontró una alternativa salvadora de lo más inesperada en la madera de balsa. Aquello fue una revelación. Toda una apertura de ojos y una toma de conciencia. Un antes y un después en su vida. Tras concluir sus prácticas, y con más calma, comenzó  a investigar sobre el cierre de Clark Foam y descubrió una verdad que por dura es hasta incómoda de reconocer: la alta toxicidad de los componentes “del juguete que los surfistas usamos en el agua” y lo nocivos que son tanto para el medio ambiente como para las personas que forman parte de su cadena de producción. Buscó una alternativa y la encontró en los mismos shapers y material que le permitieron no quedarse en el dique seco durante su estancia en Ecuador.  La madera de balsa podía ser una alternativa real, efectiva y ecológica al foam. Sólo quedaba encontrar une resina más ecológica para el glaseado".
 
Quiver de madera de balsa la factoría de Kun_tiqi en Loredo. (Milsi K.)
 
-¿Y no existe por parte de la comunidad surfera cierta ceguera a la hora de creer que realizamos una actividad inocua que tiene cero impacto en la naturaleza?
-Eso depende de cada surfista, no se puede generalizar.  Pero es una actitud muy humana el creer que no se puede hacer nada para cambiar y yo me incluyo. Buscamos siempre la excusa en el otro: La fábrica aquella tiene tanta emisión, y yo me puedo hacer tantos viajes a Indonesia, Tahití… Que lo mío es tan insignificante, en comparación a lo otro… Siempre se intenta justificar un mal comportamiento buscando a alguien peor para no sentirte culpable. Es una actitud muy humana… Al menos en nuestra sociedad.
 
Para leer la entrevista en su totalidad pincha aquí